Nuestro equipo de profesionales de Cliselec, gracias a su dilatada experiencia, afirman que los pies son
la parte del cuerpo que menos cuidamos durante todo el año causando serios problemas de salud.
No somos conscientes de su importancia y del esfuerzo que tienen que hacer a diario sosteniendo la
totalidad del peso corporal y permitiendo la movilidad del cuerpo.
No dejemos que sean los grandes olvidados.
En verano tendemos a cuidar y a proteger más los pies, ya que están constantemente expuestos. ¿Por
qué en invierno son la parte más olvidada de nuestro cuerpo? Es cierto que en esta época nuestros pies
se esconden debajo de varias capas, pero precisamente por ello no podemos olvidar su cuidado.
Debemos protegerlos y mimarlos todos los días.
Los principales problemas que pueden sufrir son: los callos, durezas y hongos por consecuencia de malas
acciones diarias que podríamos evitar. Así que para tener un cuidado saludable os damos estos sencillos
consejos que los mantendrán sanos y bonitos en invierno.
1. Utilizar un calzado acorde a nuestra morfología, el ancho y el largo del zapato deben ser los
correctos, no deben existir presiones laterales ni frontales. Lo mejor es optar por un calzado
cómodo, amplio que no apriete nuestros pies y así no dificulte la circulación de la sangre.
2. Evitar el frío y utilizar unos calcetines que calienten lo suficiente. Preferiblemente que no sean
de poliéster ya que este material aumenta la sudoración y el mal olor, lo que puede fomentar la
aparición de hongos. Aconsejamos los calcetines de algodón ya que absorben mejor el sudor y
permiten que los pies estén más frescos y que respiren mejor.
3. Si eres de las que van corriendo a todas partes, no debes abusar de zapatos con tacones o
calzado alto ya que puede causar serios daños a nuestros talones y rodillas.
4. Es importante que la suela del calzado sea antideslizante para evitar caídas o torceduras de
nuestros pies.
5. Los productos cosméticos hidratan y eliminan las durezas de los talones junto a un tratamiento
continuo impartido por especialistas. Además, si tienes tiempo, puedes realizar un baño de
agua caliente unos minutos e inmediatamente uno de agua fría. Esta combinación hará que
mejore la circulación de los pies.
6. Es aconsejable mover las piernas siempre que se pueda, sobre todo en el caso de las personas
que pasen mucho tiempo sentadas o paradas. De este modo evitaremos problemas de
circulación y los pies se calentarán con el movimiento.
7. Por último, aconsejamos incluir en nuestra dieta alimentos que sean ricos en magnesio, calcio,
vitaminas E,K y C, ya que ayudan a aumentar la frecuencia cardíaca y esto permitirá que fluya
más sangre a las extremidades.
Estos consejos son rápidos y fáciles de llevar a cabo el día a día. Acude a nuestros especialistas, ellos te
ofrecerán las necesidades que requieren tus pies, dando un trato más cercano y ofreciendo
tratamientos a medidas. Descubrirás la última tecnología en cuanto a sistemas de análisis, equipos
técnicos, tratamientos y materiales podológicos. No lo dudes y acércate a conocernos.